Luego de la 2ª Guerra Mundial, gracias a la llegada de múltiples emisoras estadounidenses a Jamaica- debido a la presencia de soldados norteamericanos estacionados en el lugar-, los habitantes locales comenzaron a hacerse cada vez más asiduos a los éxitos del Swing y el Rhythm & Blues afronorteamericano, que luego evolucionó hacia el Rock’N Roll. Esto implicó que en los  años 50, poco a poco, comenzará a desarrollarse una pequeña industria musical en la isla, gracias, en gran parte, a la proliferación de los “soundsystem”: estaciones musicales móviles que contaban con grandes parlantes y sus propios Disc Jockeys, quienes fueron claves en la difusión de estos estilos. Eventualmente, muchos de los productores a cargo de los soundsystems comenzaron a grabar versiones locales de éxitos del Rhythm & Blues, que en pocos años derivó en un nuevo estilo, nacido a partir de la mezcla de géneros norteamericanos- como el jazz y el R&B- con elementos de carácter folklórico traídos del Mento y el Calypso, y que tomó el nombre de Ska. 

Las primeras bandas de Ska, que aparecen a fines de los años 50,  toman gran parte de su instrumentación de las orquestas que hicieron la transición del Swing al R&B y que funcionaban como una especie de big band reducida, donde los vientos aún tenían un gran protagonismo. Sin duda, uno de los elementos más únicos del Ska es la acentuación de los contratiempos presente en la guitarra, y a veces en los instrumentos de teclado, que se transformará en la sonoridad más icónica de todos los géneros musicales nacidos en Jamaica. Por otro lado, el bajo mantenía normalmente una línea de walking bass simplificado, mientras la batería acentuaba los tiempos débiles del compás de 4/4 con un golpe en aro del tambor, técnica conocida como “cross stick”, bastante usada desde mediados de los años 50 por los bateristas de jazz. 

Los comienzos 

En un comienzo, los éxitos del Ska fueron en su mayoría versiones instrumentales de temas del R&B y Soul temprano, pero, poco a poco, las composiciones originales también comenzaron a florecer y se asociaron a un renovado espíritu nacionalista derivado de la independencia del país frente al dominio inglés a comienzos de los años 60. A pesar de lo alegre que puede resultar la música Ska, mucha de la cultura asociada al desarrollo del estilo, así como de los soundsystem, se relaciona con los llamados “rude boys”: jóvenes nacidos en las áreas más pobres de la isla, quienes tomaron un estilo de vida violento influenciado por los gangsters norteamericanos, y sirvieron como un curioso contraste frente a la música misma,  transformándose en íconos que muchas veces son aludidos en las letras de los artistas jamaicanos. Dentro de las figuras iniciales del Ska podemos encontrar a importantes productores y empresarios como Prince Buster, Coxsone Dodd o la banda The Skatalites.

LOS 60´S

«Hacia mediados de los años 60, el Ska comenzó a evolucionar, influenciado por la sofisticación del Soul norteamericano, lo que se tradujo en un aumento en la importancia de los solistas vocales, disminuyendo entonces el protagonismo de los bronces, además de reducirse la velocidad de los temas«

Esta baja general de los tempos tuvo implicancias sobre la base rítmica, ya que las líneas de bajo comenzaron a hacerse más sofisticadas rítmica y melódicamente, mientras que los bateristas comenzaron a enfatizar el 3º tiempo del compás de 4/4 con el bombo y el tambor, dando inicio a una de las sensaciones rítmicas que para siempre serán asociadas a la música de Jamaica. Este punto en el desarrollo del Ska fue denominado Rocksteady y se cuenta como un paso de transición entre el Ska original y el futuro Reggae que llegará a finales de la década de los 60. Paralelamente al desarrollo y popularidad del Rocksteady, la música jamaicana comenzó a gozar de cada vez más popularidad en la escena inglesa, gracias a figuras como Jimmy Cliff, quien fue particularmente influyente sobre los músicos de la escena Mod. 

A finales de los  años 60, el Rock Steady evolucionó para convertirse en el estilo más popular salido de Jamaica: el Reggae. Musicalmente hablando, el Reggae compartía muchos elementos con el Rocksteady, pero, en términos generales, disminuía aún más los tempos, contaba con líneas de bajo más sofisticadas y enfatizaba aún más los patrones acentuados en el tiempo 3, aun cuando también existen otros patrones rítmicos asociados al estilo. De manera importante, el Reggae se asoció fuertemente al movimiento religioso Rastafari, que se había desarrollado en Jamaica desde la década de 1930 y que promulgaba una reinterpretación afrocentrista de la biblia, tomando al Rey Etíope Haile Selassie como figura central (quien incluso, para algunos, representaba un paralelo a la reencarnación de Jesús). Esta conexión tuvo un eco importante en las letras del estilo, que igualmente a veces trataban temas no religiosos como el amor o la crítica social. A comienzos de la década de 1970, el Reggae logró el éxito comercial gracias a un par de temas que treparon a lo más alto de los rankings norteamericanos, mientras la banda The Wailers, liderada por Bob Marley y Peter Tosh, comenzó a establecerse como la más importante del género, desarrollando una gran conexión con la escena rockera inglesa y, eventualmente, haciendo de Marley la primera gran figura tercermundista asociada al Rock; esto, en parte, gracias a letras de carácter social y pacifista que resonaron con audiencias de todo el mundo. Luego de su éxito inicial, que incluía timbres asociados al Soul psicodélico, The Wailers se desbandó en 1974 y, tanto Marley como Tosh y Bunny Wailer, siguieron exitosas carreras solistas, agregando cada vez más sonidos modernos al Reggae, que se transformó en un estilo de popularidad global en los años siguientes, influenciando todo tipo de géneros, particularmente aquellos relacionados con la escena New Wave inglesa.  

 

 

Hacia fines de los 70 nace el DanceHall, inicialmente una versión del Reggae menos focalizada en los cantantes, que en los 80 comenzó a asociarse a nuevos sonidos de carácter electrónico, así como a DJs y Productores con un estilo de vida que parecía una actualización de los originales “Rude Boys”. Este género fue tomando popularidad con los años, poco a poco tomando estructuras más tradicionales, lo que se tradujo en varios éxitos comerciales en la escena pop norteamericana a comienzos del siglo XXI, además de su influencia patente en el desarrollo del Reggaetón.

 

 

 

A pesar de la inmensa popularidad del Reggae durante los años 70 y los 80, el Ska también logró gran éxito al fusionarse con los sonidos del Punk Rock a fines de los 70, en lo que se llamo 2 Tone, que influenció el desarrollo de toda una escena durante los 80, y una explosión comercial durante los 90 con bandas como Rancid y The Mighty Mighty Bosstones, consiguiendo gran popularidad. 

En Latinoamérica, la influencia del Ska y el Reggae fue capital en el desarrollo del Rock latino de los 80, estando presente en la música de la mayoría de las bandas de Rock más exitosas del continente, como Soda Stereo, Sumo, Los Prisioneros o Los Fabulosos Cadillacs, mientras que, en los 90, grupos como Los Pericos y Gondwana lograron convertirse en algunos de los artistas más populares de la década con su versiones propias del sonido Reggae. 

En nuestro próximo capítulo, hablaremos del origen y desarrollo de la música creada con medios electrónicos, que ha tenido un impacto gigantesco en la creación musical de las últimas décadas. ¡Nos vemos!

 

 

 

 

 

 

 

Compositor y Arreglista Profesor Historia de la Música Instituto Profesional Escuela Moderna de Música

Felipe Opazo O.