Hacia comienzos de los 50’, y con el país aún recuperándose de los horrores de la Segunda Guerra Mundial, Inglaterra veía cómo la influencia cultural de su otrora colonia, EE.UU, superaba con creces la propia, algo que tuvo un impacto significativo en el desarrollo de la música inglesa en la 2º mitad del siglo. 

Al carecer de una escena de música popular desarrollada, los jóvenes ingleses comenzaron más y más a consumir música importada desde EE.UU, y, gracias a una segregación algo menor que la existente en el país americano, muchos adolescentes se vieron expuestos a distintos estilos afronorteamericanos como el Blues Rural, con figuras como Big Bill Broonzy, o los exitosos discos de Rhythm & Blues del sello Chess, presentando a figuras como Muddy Waters, Howlin Wolf, Willie Dixon, entre otros. Al mismo tiempo, un oscuro estilo norteamericano conocido como “Skiffle”, que integraba elementos rítmicos del Jazz tradicional sumados a una mezcla de Folk y Blues, comenzó ganar una popularidad impensada en en el Reino Unido, transformándose en el género preferido de cientos de bandas jóvenes en la 2º mitad de los 50’, que poco a poco fueron dando vida a una escena musical inglesa absolutamente protagonizada por la influencia del Blues.

Blues Británico 

Eventualmente, hacia fines de la década de los 50’, comienzan a destacarse algunos exponentes como Alexis Korner, quien evolucionó desde el Skiffle al Rhythm & Blues, convirtiéndose en el padre del estilo en el Reino Unido, y de paso, creando uno de los primeros semilleros musicales de lo que próximamente sería el Rock Inglés. Si bien la influencia de los héroes del Rock’n Roll comercial era tambien importante para la juventud inglesa, la diferencia frente a sus pares norteamericanos radicaba en la predilección de muchos por los grandes íconos del R&B negro, con un especial énfasis en los grandes exponentes de la guitarra como Elmore James y  B.B King, entre otros. Esta obsesión de los ingleses con el Blues se manifestó en la creación de múltiples bandas a principios de los 60’, que cada vez dominaban de mejor manera los códigos de un estilo que originalmente les era totalmente ajeno. Todo esto terminó derivando en un nuevo movimiento, que retomaba los aspectos contraculturales del Rock’n Roll original, perdidos en EE.UU con la invasión del Teen Pop, y los sumaba a su interpretación del Rhythm & Blues. Eventualmente, esta versión inglesa del Rhythm & Blues fue bautizada por la prensa como Rock, y sus exponentes como “rockers”, donde destacan en un comienzo figuras como John Mayall y su agrupación The Bluesbreakers, o posteriormente The Yardbirds y The Rolling Stones. Es clave destacar la importancia de este movimiento de Blues inglés en el desarrollo del Rock, ya que dentro de los músicos que pasaron por estas primeras agrupaciones, considerando los grupos de Alexis Korner, John Mayall y los originales Yardbirds, podemos encontrar nombres como Ron Wood, Mick Jagger, Jack Bruce, Ginger Baker, Eric Clapton, Peter Green, Jimmy Page y Jeff Beck, entre otras figuras legendarias asociadas a la música inglesa.

Como contraparte al movimiento “rocker”, existían otros jóvenes, quienes, si bien valoraban totalmente la influencia del Rhythm & Blues, estaban abiertos a recibir otros estilos, desde el Teen Pop de fines de los 50’, al nuevo Soul estadounidense de los 60’, por lo que normalmente eran más abiertos al uso de la forma canción y la experimentación fuera de los confines de los 12 compases del Blues. Estos músicos fueron bautizados como “mods”, en relación a su modernidad frente al fundamentalismo de los rockers. En lo extra musical, los mods tendían a tratar temas variados en sus letras y presentar una puesta en escena sofisticada en cuanto a la vestimenta. A pesar de las diferencias, en los primeros años del Rock Inglés estas dos tendencias tuvieron bastante interacción, incluso bandas que en un comienzo habían sido definidas como “rockers”, evolucionaron hacia un lado más “mod”, como por ejemplo The Yardbids o The Rolling Stones. 

 

La “Invasión Británica”

«El Rhythm & Blues, o R&B, como se suele abreviar, nos presenta un claro portador melódico (normalmente un cantante o instrumento solista), que está acompañado de una sección rítmica (comúnmente un piano, guitarra, contrabajo y batería), además de una sección que cumple principalmente un carácter responsorial, pudiendo estar representada por ejemplo, por un grupo vientos o incluso alguno de los instrumentos de la base rítmica». 

Si bien, hoy en dia, el Rock es normalmente definido como un fenómeno musical inglés, resulta imposible no cuestionar esta afirmación, teniendo en cuenta cómo los jóvenes músicos ingleses inicialmente se basaron musicalmente en géneros norteamericanos mayormente de décadas pasadas, lo que nos lleva a pensar que, a pesar de la importantísima influencia que tiene sobre la música estadounidense el concepto de banda que toca sus instrumentos y compone, algo característico de los grupos ingleses,  la real importancia histórica del Rock no radica en la música misma, si no en lo extramusical, con la recuperación de los factores contraculturales del Rock’n Roll original como principal arma.

En nuestro próximo capítulo, hablaremos acerca del desarrollo del Rock estadounidense en los 60’, que, tomando influencia del Folk, de la invasión británica y del Soul contemporáneo, dará origen a un movimiento contracultural que pondrá en jaque los valores más tradicionales de la sociedad norteamericana, así como también nos presentará una era cargada de experimentación y riesgo en la música popular.

 

 

Compositor, Arreglista Y Profesor Historia de la Música Instituto Profesional Escuela Moderna de Música

Felipe Opazo