Dentro de la historia de la música popular del siglo XX, la segunda mitad de la década de 1960 representa, sin duda, un momento único, donde la contracultura y la experimentación permeabilizaron la creación musical de muchas de las bandas y artistas más populares, así como también el gusto del público, que estaba mucho más dispuesto a ser desafiado por las composiciones de la época. En términos generales, la cultura asociada al movimiento hippie y los grandes festivales al aire libre, tenía como principales protagonistas a jóvenes universitarios, quienes, hacia el cambio de década, poco a poco comenzaron a entrar al mundo laboral adulto, y, en muchos casos, a abandonar el idealismo tan característico de la contracultura de la costa oeste de EE.UU, adoptando valores más cercanos al competitivo mundo urbano de las grandes ciudades a comienzos de los años 70. Al mismo tiempo, la adopción paulatina- pero cada vez más común- de ciertas tecnologías como los sistemas de audio stereo de alta fidelidad o la radio FM, ayudó a cambiar la percepción en torno al sonido entre la población; lo que a su vez, impactó la creación musical Pop, que tendió a alejarse del concepto psicodélico y el sonido amplio de fines de los años 60 en pos de una estética limpia, clara y que dejaba atrás las largas jams, focalizándose en temas con estructuras más definidas, de 3’30’’ de duración, más amables para el consumo radial. Sin embargo, a pesar de haber cedido el rol protagónico que había gozado a fines de los años 60, la contracultura encontró su lugar en distintos nichos, que, en el caso de la música, se tradujeron en el desarrollo de corrientes como el Glam Rock, Rock Progresivo y de Vanguardia, y en la segunda mitad de la década el Punk y Heavy Metal

UN NUEVO SONIDO

Durante la transición entre los años 60 y 70, el Rock perdió, en menos de un año, a tres de sus íconos más importantes, como fueron Jimi Hendrix, Janis Joplin y Jim Morrison, lo que adelantaría la crisis venidera del sonido libre y experimental de los años 60 en la música Pop/Rock.

Sin ir más lejos, los primeros años de los 70 vieron el ascenso de nuevas figuras de la música Pop, que combinaban elementos de la canción Folk y bases rítmicas derivadas del Soul, con estructuras, armonías y arreglos del Pop tradicional, destacándose por un sonido cada vez más limpio y bien definido, una versión refinada de los códigos del Rock que se alejaba totalmente de la estética más cruda del Pop Rock sesentero. Dentro de estos artistas podemos encontrar a bandas como The Carpenters, y solistas como Elton John, James Taylor o Carole King, quienes a principios de la década de los 70 lograron vender millones de copias con sus álbumes orientados a lo que en su momento los medios denominaron “Soft Rock” o “Rock Suave”. A medida que pasaron los años, muchos de los artistas más vendedores de la década fueron justamente exponentes de este sonido, como por ejemplo Bad Company, Boston o la banda Eagles. Ésta última se influenció por el Soul y el Folk Rock californiano de los años 60 y desarrolló una versión refinada y pulida de ese sonido, lo cual encantó a las audiencias estadounidenses, lo que les permitió contar con dos de los discos más vendidos de la historia hasta el día de hoy. Eventualmente, hacia fines de la década, el éxito del Soft Rock siguió en alza, con fenómenos tan curiosos como el de Fleetwood Mac, una banda inglesa originalmente de Blues Rock, que cambió totalmente su estilo, así como varios de sus integrantes, radicandose posteriormente en EE.UU y logrando transformarse en otro de los íconos más vendedores de la década con discos como  “Rumors”, editado en 1977. Otro caso notable e emblemático es el de Toto, una banda formada por jóvenes músicos de estudio, quienes, habiendo grabado en muchas de las sesiones Pop más exitosas desde mediados de los años 70, conocían los códigos musicales que se manejaban y terminaron definiendo el sonido del Soft Rock de fines de los 70 y comienzos de los 80, cuando el género tomó el nombre de AOR, o “Adult Oriented Rock”, Rock orientado a adultos. 

AMBICIÓN Y POPDentro del Pop Rock de los años 70 existen algunos casos muy interesantes de bandas que mezclaron elementos de la complejidad y ambición del Rock Progresivo con el lenguaje Pop y Rock, logrando un increíble éxito comercial con grandes producciones discográficas que se ayudaban de la creciente tecnología en los estudios de la época. Entre estas bandas podemos contar a nombres tan populares como Electric Light Orchestra, Supertramp o Queen, todos exponentes de esta peculiar, sofisticada y ambiciosa mezcla musical. 

A pesar de que la contracultura fue controlada de manera certera por parte de la industria en la parte más comercial de la música de los años 70, el espíritu rebelde y experimental relacionado al Pop Rock tuvo uno de sus nichos más importantes en el llamado “Glam Rock” que surgió hacia el cambio de década, en gran parte asociado a la figura del artista inglés David Bowie, quien comenzó a editar discos a fines de los años 60, destacándose por canciones Pop con elementos progresivos, y por una particular puesta en escena que derivó en proyectos tan llamativos como el de su alter ego Ziggy Stardust, que logró un gran éxito comercial y ayudó a definir la estética “glam”. En términos generales, se hace difícil asociar el concepto de “glam” a algo estrictamente musical, ya que en este adjetivo tiene que ver directamente con el glamour de la vestimenta, maquillaje y una actitud escénica de carácter teatral. A pesar de eso, es común encontrar en muchas de las bandas y artistas de Glam Rock de principios y mediados de los años 70 algunos elementos similares, que en general tienen que ver con una apertura a la experimentación, como es el caso del mismo Bowie o de bandas como Roxy Music, aunque también puede asociarse al uso de sonidos más bien orientados al Pop de décadas anteriores. Otro punto que conecta al Glam Rock con la contracultura es su asociación con los primeros movimientos gay que surgen a comienzos de los años 70, con artistas como T Rex o Gary Glitter como íconos más importantes. Más allá de haber surgido como un pequeño movimiento inglés a comienzos de los 70, la estética asociada al Glam Rock influenció gran parte de la música de la década, pudiendo verse su influencia clara en la puesta en escena de artistas Pop, Rock, Hard Rock, Funk y Punk. 

Otro punto interesante de la música de los años 70, es la popularización de los mega conciertos en arenas techadas y estadios, que implicaron el desarrollo de toda una infraestructura nueva, así como el inicio de verdaderos espectáculos teatrales por parte de distintas bandas, quienes competían por tener el escenario más grande, la decoración más pomposa y el show más elaborado. 

En nuestro próxima capítulo, abordaremos uno de los estilos más influyentes desde fines de los 60 hasta la actualidad, el Hard Rock, que en los años 70 alcanzó gran éxito de la mano de algunos de los grupos más importantes de la historia de la música popular. 

 

Compositor, Arreglista Y Profesor Historia de la Música Instituto Profesional Escuela Moderna de Música

Felipe Opazo